A pesar de los documentos históricos, mucha gente sigue creyendo que
la reivindicación palestina es la de “recuperar” un estado. La verdad es
que nunca hubo estado, nación y, hasta hace dos generaciones, tampoco
un pueblo que se identificara a sí mismo como palestino. Los
negacionistas de esta realidad se apoyen en la falsa igualdad Filistea =
Palestina.
Los filisteos fueron un pueblo de la antigüedad, parte de los
llamados por los egipcios de entonces “pueblos del mar”, que aparecen en
la zona de Canaán en el siglo XIII AEC y conquistan el sureste (lo que
hoy día sería Gaza, Ashkelón y Ashdod). Su nombre -del que mucho más
tarde, en el año 135 EC, ya desaparecidos los filisteos tres siglos
antes, el emperador romano Adriano derivará en latín el de Palestina
para erradicar definitivamente todo vestigio de los rebeldes del reino
de Judea- deriva… del hebreo. En esa lengua, paleshet significa invasor.
Los israelitas convivieron siglos con los molestos vecinos del sur,
algunos de ellos rescatados del olvido para la cultura occidental
gracias a su inclusión… en la Biblia judía. Los más famosos, sin duda,
son la traidora Dalila y el gigante Goliat. Paradójicamente, los
actuales palestinos no tienen ninguna vergüenza en trastrocar los
protagonistas y convertirse ellos en el joven y valiente David,
enfrentado al aterrador monstruo… israelí.
De modo que toda mención de Palestina (o nombre semejante) anterior
al citado año de 135 en latín, griego u otra lengua, se refiere a lo que
hoy día en español se denomina Filistea, justamente para diferenciarlo
del período que incluye el fin de la dominación romana, el imperio
bizantino, la conquista musulmana y el imperio otomano sobre las tierras
originalmente pobladas por los antepasados directos religiosa, cultural
y genéticamente de los actuales judíos. Durante este período de 19
siglos (del 135 a 1917), esta zona nunca fue independiente (excepto por
los breves reinos cristianos en tiempos de la Cruzadas), ni la ciudad de
Jerusalén desempeñó capitalidad alguna.
Durante el tiempo del exilio, la subprovincia Siria-Palestina quedó
prácticamente despoblada y abandonada, como lo testimonia Mark Twain en
su libro “Innocents Abroad” de 1867. Según el demógrafo Sergio
Della Pergola, hasta el siglo XIX no se superaron los 250 mil habitantes
(hoy, entre Israel y los territorios bajo administración palestina
suman más de 12 millones), con un incremento exponencial a partir de la
llegada de los inmigrantes judíos (sionismo moderno), que funcionó de
“efecto llamada” para los árabes de la zona, principalmente, egipcios y
sirios, poco antes y durante el mandato británico en la zona, de 1918 a
1948.
No es sino a partir de estas fechas cuando aparecen las primeras
menciones de un pueblo palestino, cuya Autoridad Nacional reivindica una
continuidad histórica inexistente de los árabes actuales con los
antiguos filisteos. Es como si los neoyorquinos se creyeran ahora
mohicanos.
Shabat Shalom
Jorge Rozemblum es director de Radio Sefarad
Pulse aquí para acceder a la programación semanal completa y a los enlaces de Radio Sefarad
Lluis Llach compara Beirut con Mauthausen
-
El compositor, cantante y actual líder de la Asamblea Nacional de
Cataluña (ANC), Lluis Llach ha comparado la guerra entre Israel y Hezbolá
con...
Hace 2 días